
Colectivos en defensa del territorio convocan una nueva manifestación en Tenerife el 18M para pedir un cambio de modelo en Canarias
Santa Cruz de Tenerife.- El próximo 18 de mayo, Santa Cruz de Tenerife será escenario de una nueva manifestación en defensa del territorio, convocada por la plataforma ‘Canarias tiene un límite’ junto a otras organizaciones como ATAN, La Asociación en Defensa de Nuestra Tierra, Salvar el Puertito, las Kellys de Tenerife y Salvar La Tejita.
La protesta, que busca poner en el centro del debate público la necesidad urgente de un cambio de modelo turístico en el archipiélago, sigue la estela de movilizaciones previas como la multitudinaria del 20 de abril de 2023 —que reunió a centenares de miles de personas en las siete islas— y la del 20 de agosto del mismo año, que movilizó a miles en zonas turísticas del sur de Tenerife y Gran Canaria.
Entre las principales reivindicaciones de los colectivos convocantes se encuentran la implantación de una moratoria turística, la aprobación de una ecotasa, el establecimiento de una ley de residencia y el cese inmediato de proyectos que atentan contra el medioambiente. Denuncian especialmente la proliferación de macroproyectos insostenibles que amenazan los espacios naturales de las islas, como el Puerto de Fonsalía, la urbanización Cuna del Alma en el Puertito de Adeje o el Circuito del Motor.
La manifestación partirá desde la Plaza Weyler a las 11:00 horas y recorrerá las principales calles de la capital tinerfeña, en un intento por emular la histórica movilización del 20A del año pasado.
Desde las organizaciones convocantes hacen un llamado a la ciudadanía a participar masivamente en esta nueva jornada de movilización social para frenar el deterioro ecológico y social que, advierten, está dejando la industria turística sin regulación en Canarias. «Nuestro territorio no es infinito, ni tampoco nuestra paciencia», señalan en su comunicado.
Partidos políticos como Podemos Canarias ya han mostrado su respaldo a la convocatoria y han instado a la población a sumarse a las protestas, destacando la importancia de un modelo de desarrollo que respete los límites ecológicos del archipiélago y garantice la justicia social.